RESEÑA #24 "ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS" - LEWIS CARROLL

TITULO: Alicia en el País de las Maravillas (Alice in Wonderland).
AUTOR: Lewis Carroll.
EDITORIAL: Vicens Vives.
Nº Pag: 256.
ISBN: 9788468200392.

SINOPSIS:

Una tarde de julio de 1862, el profesor de matemáticas Lewis Carroll salió a dar un paseo en barca acompañado de las hermanas Liddell. Las tres niñas le pidieron que les explicara un cuento, y así nació Alicia en el País de las Maravillas (1865), la historia de una niña que visita un reino fabuloso donde los animales hablan, las personas cambian de tamaño cada dos por tres y todo se rige por la lógica del disparate. Enfrentada a un universo que no entiende y en el que nadie la entiende, Alicia tendrá que armarse de paciencia, aguzar su capacidad de observación y madurar a paso rápido. 

OPINIÓN PERSONAL 

   El libro que hoy se reseña requiere poca presentación, ocupando un lugar privilegiado en mis recuerdos y apuesto que también en los vuestros. Puede que muchos de vosotros  no hayáis leído “Alicia en el País de las Maravillas” pero sin duda alguna, algunos, alguna vez visteis su adaptación cinematográfica y/o conoces su historia. Su autor Lewis Carroll nunca llegaría a imaginar que su alocado cuento, por entonces creado para la pequeña Alice Liddell, tomándola a ella como protagonista, se convertiría en una obra de fama mundial, que aún hoy despierta gran interés y entusiasmo tanto a pequeños como a mayores. Y es que, ¿quién no ha soñado alguna vez con perseguir al conejo blanco hasta su madriguera, para así descubrir un mundo mágico donde absolutamente todo es posible?

   La pequeña Alicia derrocha una insuperable imaginación, única y desbordante,  resultando no tener límites sus fantasías, por ello, ¿qué tiene de extraño ver a un conejo vestido con una chaqueta observando un reloj de bolsillo mientras cree llegar tarde? Aburrida como se encuentra en esa calurosa tarde, decide sin más, seguir al conejo hasta su guarida, donde cae a un vacío infinito. Es así como Alicia llega al “País de las Maravillas”, donde conoce a los personajes más asombrosos e increíbles, fantásticos animales y mágicos objetos. Aquí todo es posible, no llegando nunca su imaginación a concebir un mundo tan loco y disparatado como el que tiene ante sí. Pero además de irracional y absurdo, este mundo y sus extraordinarios y entrañables seres, despiertan en Alicia emociones y curiosidad infinitas.

   “Alicia en el País de las Maravillas” es fruto de las historias que Carroll le contaba a Alice Liddell y a sus hermanas, las cuales residían cerca del escritor. Se inspiró en los paseos que juntos realizaban, en los juegos, y sobre todo en el espíritu de Alice, para la que años después acabaría escribiendo y dedicando su primer manuscrito. Se ha especulado mucho sobre la relación que tanto ella como Carroll mantenían por entonces, lo que es cierto es que aquello que nació  como un pequeño y privado cuento ilustrado por el propio autor, ha perdurado en el tiempo marcando a generaciones. Lewis Carroll pretendía representar la transición de la niñez a la madurez basándose en su personal concepción de cómo lo veía. El mayor éxito de esta excéntrica y perturbadora historia radica en como su autor logró alcanzar la atención de todos los públicos, desenterrando la ingenuidad e inocencia de esos mayores que hacía tiempo no recordaban. Es por ello que aunque para un determinado sector solo era un cuento infantil, otros pudieron ver que esta irreflexiva historia era un reflejo de la sociedad de entonces, representada figuradamente por personajes que Carroll conocía o había conocido realmente en su vida.  

 

    La edición de un libro  determina el disfrute en mayor o menor medida por parte de su lector. Algunos logran  que nuestros sentidos se desplieguen al sentirlo entre tus manos. Es lo que ocurre con esta edición, prolija en anotaciones a pie de página que indican el significado de expresiones, datos históricos, o aclaraciones sobre aquello que realmente Carroll pretendía hacernos entender. Además, al inicio del libro, se recoge una introducción donde podemos conocer a fondo tanto al autor como a las hermanas Liddell, así como el proceso de creación de la obra, todo ello acompañado de numerosas fotografías originales. Así, con esta rica y cuidada presentación, se logra apreciar la intención de la editorial en trasladarnos la esencia de la historia original en un contexto cercano a su primitiva naturaleza. 

    Todo ello aderezado por las impresionantes y preciosas ilustraciones de Robert Ingpen, conocido por retratar muchas otras famosas historias y cuentos. Son pocos los adjetivos que existen para elogiar la mimada edición que acarician mis manos. Sus vivos colores bañan cada página, sus trazos dibujan magistralmente bien a sus personajes llenándolos de vida y el modo en el que las imágenes acompañan las palabras de Carroll, en ocasiones a lápiz y otras llenas de enérgicos tonos, resultan en síntesis la perfecta llave para introducirnos en el “País de las Maravillas”. Ejemplares como este te enamoran desde el primer segundo, armonizando relato y presentación en perfecta simbiosis. 

   “Alicia en el País de las Maravillas” es un cuento de obligada lectura que seguirá cautivando a generaciones futuras. Es y continuará siendo fuente de inspiración para la literatura, la música y el cine. Alicia permanecerá impertérrita ante el paso del tiempo, imperturbable ante la historia, sin importarle nada nuestra edad o nuestros gustos, siempre estará dispuesta a abrirnos mágicamente su mundo para conocerlo por vez primera o releerlo una y otra vez, llevándonos de la mano a jugar  al croquet con la malvada Reina de Corazones o, mejor aún, a una interminable hora del té junto al excéntrico Sombrerero Loco.

“Alicia solía darse muy buenos consejos (aunque pocas veces los pusiera en práctica).”

“- Ah!, no podrás evitarlo – dijo el Gato -: aquí estamos todos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca.

-       ¿Cómo sabes que estoy loca? – dijo Alicia.

-       Tienes que estar – dijo el Gato -, o de lo contario no habrías venido aquí.”

★★★★★ 5/5