TITULO: Pura Demencia.
AUTOR: Laia Fontanet Casellas.
EDITORIAL: Editorial Círculo Rojo.
Nº Pag: 134.
ISBN: 9788491754947.
SINOPSIS:
Entre líneas vas a encontrar la demencia que
cada una de nosotras recorre a su manera. Ya sea con las medias medio
caídas, con los pelos a lo loco, con o sin tacones, con moño a lo
maruja, con sexo complicado, con un final imperfecto, con lo no
esperado, con puro placer, con la calma, con las prisas, con sueños
tristes, con retos alucinantes, con sueños raros, con una llamada en la
madrugada, corriendo por la ciudad, con sujetadores incómodos, atacada
de los nervios, queriendo, no queriendo, sin entender nada, entendiendo
todo, queriendo la soledad, queriendo un romance.Todas corremos hacia distintas direcciones, pero todas compartimos algo: lo que implica ser mujeres.
OPINIÓN PERSONAL
Hacía tiempo que me apetecía una lectura
diferente y breve, un libro que rompiese la monotonía y habitualidad de nuestra
línea acostumbrada de leyenda, y con ello aportar algo de frescura improvisada
nada que ver con lo leído hasta el momento, y así también alejar ese temido
pero típico “bloqueo de lector”. Por ello, cuando se cruza en mi camino “Pura demencia” de Laia Fontanet Casellas,
reacciono y me digo “me parece una interesante próxima opción”. De su autora os
diré que nace en Igualada (Barcelona) y estudió Arte Dramático y Estilismo de
Moda. No es hasta 2016, cuando pierde su empleo y se queda en paro, comenzando
en ese momento a dedicar su tiempo a otra cosa bien distinta, la escritura. Sus
breves escritos bebían de la inspiración de emociones, experiencias y vivencias
pasadas las cuales fueron aunadas para dar cuerpo al ejemplar que hoy reseño. Tras
ver su divertida cubierta y los avances que Laia iba publicando, tanto de
fragmentos como de las ilustraciones que lo decoran, provocaron en mí una
incuestionable curiosidad por conocer su contenido y descubrir aquello que la
autora ansía compartir con todos a través de sus páginas. Podemos encontrarnos,
en total, los siguientes 29 capítulos: “Vaya,
se les olvidó”, “Lleno hasta los
topes”, “¡Que les den a los
príncipes!”, “¿Rana o sapo?, “Maldito Feeling”, “Déjate remover”, “Caótico
control”, “Este sí que sí”, “Sabe a tarde de lluvia, sabe a lluvia”,
“Dichoso Pepito grillo”, “¡Ayuda por favor!”, “Me dejó con un post – it”, “Dichoso pedestal”, “¿Volverías con él?”, “Aprendí
con placer”, “Con unos tacones lo veo
mejor”, “Soy un poco Bridget, ¿y qué?”,
“Solo es sexo”, “Los maduritos están de moda”, “¡Soltera
a los treinta!, ¿y qué?”, “Todo
empezó con un simple…”, “¡Un chupito
de autoestima por favor!”, “No son mi
sujetador”, “Crea tus rituales”, “Sí, es cosa del destino”, “De eso se trata, de ser feliz”, “Cuestión de tiempo”, “¿El ego para qué?”, “¿Y qué?”.
Laia aborda, de un modo cercano, diría sin
complejos ni tapujos, diferentes temas: el amor, las inseguridades, la amistad,
los prejuicios, la madurez,…la vida misma en toda su expresión y en todas sus
manifestaciones. Pero sobretodo lo hace desde un punto de vista muy particular,
desde el suyo, desde la perspectiva femenina. Aborda con peculiar ironía los tópicos
de lo cotidiano sobre la mujer, como inciden sobre lo femenino y como
reaccionamos las féminas ante estos. Capítulo a capítulo se centra en un
aspecto y en ocasiones vuelca sus experiencias en las palabras empleadas,
reforzando y motivando su punto de vista y consiguiendo que nos identifiquemos
fácilmente con ella. Durante el recorrido del libro son varias las ocasiones
que me reconozco en sus páginas, en sus palabras que expresan con rotunda
fidelidad experiencias que a buen seguro compartimos todas y que al leerlas es
inevitable esbozar una sonrisa y asentir con la cabeza, confesándote en tu
soledad silente que eso mismo también te ha pasado. El humor es parte necesaria
en este trabajo, encontrándose muy presente, conjugándose del mismo modo
adecuadas dosis de ironía incluso con ciertos temas que aún son tratados como tabú en nuestros días. Pero si algo sobra en
este texto son los prejuicios, su relato fresco y desenfadado demuestran una
realidad que pese a que nos pueda sacar los colores y abrumar, es una verdad
incontestable que todas coincidimos en reconocer.
Por encima de todo sobresale el mensaje
que Laia pretende que conservemos y tengamos muy presentes: nunca dejas de
crecer y madurar, siempre te equivocarás y cometerás errores, pero la vida
consiste en aprender de ellos, en arriesgarse y en llegar a conocernos a
nosotros mismos. Respecto a nuestras inseguridades, todas somos imperfectas,
todas tenemos incertidumbres y dudas y nos disgusta ciertos aspectos de nuestro
cuerpo y carácter, pero es precisamente todo ello lo que nos hace personas
únicas e irrepetibles, y esto debe convencernos para alcanzar la confianza en
nosotras mismas, en superar cualquier obstáculo, amarnos tal como somos,
aceptarnos y tener una buena y alta autoestima, pero lo que es más importante
ignorar esos comentarios o pensamientos que pueden o pretenden hacernos daños.
Prejuicios cero porque tú puedes, tú lo vales…
El formato es extremadamente sencillo,
predominando el blanco tanto en su cubierta como en las ilustraciones que
contiene en su interior. Pero es precisamente el modo en el que estas están
diseñadas y la correcta elección de los escasos colores, en el lugar adecuado y
acompañando al texto apropiado, lo que cambian por completo la edición y la
percepción que hubiésemos tenido de su lectura si esta hubiese prescindido de
las mismas. Mención especial a Marisa Jiménez gracias a la cual hemos podido
disfrutar de las mismas.
Sin duda, una lectura fresca, divertida y por
supuesto diferente, genial y conveniente para desconectar de otras más densas o
profundas que precisan de más tiempo u otro tipo de atención. Su formato breve
ayuda a digerirlo prácticamente de una sola sentada. “Pura
demencia” es una ventana a la realidad, a esa realidad a veces incómoda,
otras inconfesables, que a todas nos rodea y compartimos y pocas son capaces de
gritar, de compartir, y Laia ha querido hacerlo.
“Todo
pasa por algo. Así que baila. Come helado. Habla “balleno”. Ten ataques de
risa. Ama. Como si no hubiera un mañana. Disfruta de todo lo que tiene
preparado el destino para ti.”
Muy agradecida por tu reseña. Un placer leer cada una de las palabras que escribes con delicadeza y decisión. Nos vemos entre libros. ¡Un abrazo!
ResponderEliminar¡Hola Laia! Un honor tenerte por mi blog y leer tu comentario. Soy yo la que te agradezco el que hayas compartido con todos tus palabras por medio de este original ejemplar ¡Mis mejores deseos en esta aventura! :D
Eliminar¡Un abrazo!