RESEÑA #72 "EL NOMBRE DEL VIENTO" - PATRICK ROTHFUSS

TITULO: El nombre del viento (The name of the wind).
AUTOR: Patrick Rothfuss.
EDITORIAL: DEBOLS!LLO.
Nº Pag: 880.
ISBN: 9788499082479.

SINOPSIS:

Por primera vez Kvothe se dispone a relatar la verdad sobre sí mismo. Y para hacerlo bien, deberá empezar por el principio: su infancia en una troupe de artistas itinerantes, los años malviviendo como un ladronzuelo en las calles de una gran ciudad, y su llegada a una universidad donde espera aprender una magia de la que se habla en las historias… Atípica, profunda y sincera, El nombre del viento es una novela de aventuras, de historias dentro de otras historias, de misterio, de amistad, de amor y de superación, escrita con la mano de un poeta y que ha deslumbrado—por su originalidad y la maestría con que está narrada— a todos los que la han leído.

OPINIÓN PERSONAL

     Hace ya unas semanas empecé una lectura que a medida que avanzaba en la historia, se acrecentaban mis ganas por compartirla con vosotros, pues su relato os puedo afirmar sin margen de error, os maravillará y fascinará como a mí. “El nombre del viento” de Patrick Rothfuss, es un libro que aborda el género fantástico con fantástica destreza, al nivel de esas obras maestras que te atraparon hasta emocionarte como pocas veces consiguieron. Rothfuss, estadounidense nacido en 1973 capaz de obtener del mal tiempo sempiterno que  solía hacer en su lugar natal y de la ausencia de televisión por cable, la afición incondicional por la lectura. En 1991 se matricula en la universidad, concretamente en ingeniaría química pero con el tiempo descubre que dichos estudios no son lo suyo. Tras invertir años en la formación universitaria, decidió que el mejor modo de sacar partido a esta era graduándose en filología inglesa. Fue durante esta etapa cuando trabajó en diversas publicaciones y complejos estudios, al mismo tiempo que gestaba una extensa novela de fantasía. Esta fue enviada a las editoriales, las cuales supusieron gran decepción al rechazar su publicación. Tras ganar algún que otro concurso literario con extractos de su novela, Patrick vuelve a intentar enviarla a una editorial la cual accede a publicarla en 2007, dividiendo la historia, “Crónica del asesino de reyes” en tres tomos siendo el primero de ellos el que hoy os traigo a través de estas líneas. No fue hasta 2011 cuando fue publicada su continuación, “El temor de un hombre sabio”, mientras que aún estamos a la espera de conocer con exactitud la fecha en la que podremos seguir disfrutando de esta historia a través del tercer título “Las puertas de piedra”. Aunque a su espalda lleva numerosas publicaciones, el reconocimiento y los galardones vinieron de la mano de los dos libros publicados que componen la trilogía. Es justo destacar la loable faceta que Patrick ejerce colaborando permanentemente con ONG´s, resultando ser un infatigable defensor de sus causas solidarias, realizando para ello concursos con el mismo objetivo. Todo lo anterior repercutió  en mí como un fuerte estimulante que atrajo mi atención como pocas veces he sido consciente, y ello sumado a las numerosas recomendaciones tanto en persona como online y teniendo conocimiento que han comprado los  derechos para adaptar la ficción a la pequeña pantalla en forma de serie, generó una decisiva resolución; definitivamente tenía que ser partícipe en primera persona de esta supuesta obra épica, pero lo de supuesta pronto se descolgó, pues en mi opinión, la historia convence y promete sin paliativos. Se trata de un prometedor inicio a un mundo colosal y fantástico, creándote su conclusión tal estado de avidez y deseo que solo la continuación de la segunda entrega calmará tus ansías a modo de bálsamo. Pero cuidado, esta sugerencia contiene posibles efectos secundarios, ya que debes ser consciente que la cura definitiva a ese convulso estado emocional literario solo será posible tras hacerte con su continuación. 

 Nuestro protagonista es Kvothe, un hombre que con la ayuda de su alumno y discípulo Bast, gestiona y regenta una posada cuyo nombre es “Roca de Guía”. Sus años de juventud hace mucho que lo abandonaron y, escondiéndose de su pasado donde se le podía reconocer con facilidad gracias a su cabellera rojiza como el fuego, opta por refugiarse haciéndose  llamar Kote. Lo que no espera es que esos años olvidados como músico, arcanista, guerrero, estudiante, amante e incluso asesino, llamen un día a su puerta de la mano de Devan Lochees, un célebre cronista cuyo trabajo es escribir sobre la vida de los personajes contemporáneos más famosos y admirados. Así que tras seguir el rastro de Kvothe llega a la posada con la intencional esperanza de poder redactar su biografía. Tras soportar su insistencia, Kvothe accede a desvelar su historia con la condición de compartirla con él en tres días (correspondiéndose cada día a un libro de la trilogía). De este modo accedemos a los primeros años de vida de nuestro protagonista, un joven que por entonces acompañaba a su familia, unos artistas itinerantes que junto a su compañía de acróbatas, músicos,…etc., viajaba por diferentes ciudades. Se convierte en un excelente cuenta cuentos con un don increíble para la música. En uno de sus viajes Kvothe se queda maravillado al conocer al arcanista Abenthy, más aun cuando lo sorprende pronunciado mágicas e imposibles palabras a las cuales se le conoce como “el nombre del viento”. Abenthy acaba uniéndose a la compañía de artistas ya que descubre en el joven una habilidad especial y pretende formarle e instruirle. Pero la vida de Kvothe da un giro tras varios y terribles acontecimientos y su único objetivo se convertirá en viajar a la Universidad, centro donde solo los más poderosos y ricos pueden recibir una intensa educación en las artes mágicas. Pagándose los estudios gracias a su virtuosismo con la música, emprende un camino donde aprenderá cosas impensables e increíbles, donde demostrará que Abenthy no se equivocaba respecto a él, se enamorará y sufrirá por partes iguales y forjará amistades inolvidables.

       No podemos olvidar que la historia en sí transcurre en el presente, en un solo día, aunque la mayor parte de la trama se traslada al pasado a través de las palabras Kvothe. A pesar de ello, no cabe lugar a la pérdida del hilo argumental por parte del lector, todo lo contrario, cada vez que aparece alguna inoportuna interrupción en la narración del protagonista por motivo de un eventual acontecimiento en la posada, lo único que quieres es que retome su historia para seguir fascinándote con sus hazañas. Esta acertada combinación de narración dentro de otra narración estimula al lector generándole un plus de interés añadido. Puede intimidar el tamaño del libro, pero nada más lejos de la realidad, pues una vez te imbuyes en la historia, el tamaño es solo una subjetiva percepción meramente física o estética, quedando prontamente relegada a un plano irrelevante. El lenguaje empleado por Patrick dista mucho de ser enrevesado, y su pluma nos brinda una lectura accesible con prolijas descripciones tanto de personajes y lugares, como de evocaciones y “hechizos” que por unos minutos te resultan totalmente posibles y reales. Este es uno de los atractivos de la historia, la perfecta simbiosis de lo psicológico y  lo mágico idóneamente presentados, de tal modo que se formula con una lógica racional que alcanza a tu pensamiento con la idea de que con práctica y estudio lo imposible es realizable.

     Con la gran variedad de personajes que se cruzan en la vida de Kvothe, es difícil que no encuentres un favorito, o que te roben una sonrisa, pudiendo llegar a resultarte o todo lo contrario…, y solo es cuestión de tiempo emocionarse con ellos. Patrick acertó en la presentación y versatilidad de los mismos. Por otra parte, Kvothe es mostrado como toda una leyenda, en la que se le reconoce por momentos como héroe y por otros como villano, de apariencia tranquila e inalterable. Sea para bien o para mal, las canciones y mitos hablan de las proezas del “sin sangre” del pelo de fuego. Cautiva el modo en el que el autor lo estructura todo, labor ardua pero admirable cuando se trata de un relato tan complejo y extenso con tantos personajes y tramas. 

     Otro aspecto que me fascinó es, como comenté con anterioridad, el mundo de fantasía situado en una ficticia edad media que nos recuerda a “El señor de los anillos”, “Juego de Tronos” e incluso, “Harry Potter”. Obras todas ellas de repercusión universal. Precisamente por ello ha recibido numerosos reconocimientos y magnificas críticas, la madurez con la que narra la historia y las correctas y precisas dosis que regala al lector sin abusar del romance, la fantasía, el humor, el drama o lo épico, tal y como en su día presentaron los título citados y con los que se las puede comparar, diría, sin complejos.

     Quién sabe si nos encontramos ante el inicio de una trilogía que con el tiempo será reconocida en el universo literario tal y como lo son las otras historias de las que bebe. Por mi parte solo puedo recomendar su lectura si os atrevéis a iniciar una aventura tripartita con todo lo que conlleva, pero que a buen seguro os emocionará en todos los sentidos, porque “El nombre del viento” no solo es fantasía, sino un compendio de géneros como pocos podemos disfrutar verdaderamente en nuestros días. Añadir que espero que Patrick Rothfuss no se haga de rogar más y evite el sufrimiento de sus fans publicando pronto el desenlace de su trilogía. Os invito pues a que entréis en esta asombrosa posada y seáis testigos de las palabras de Kvothe, un  increíble relato que conoce como nadie, su pasado, su propia historia.

"He robado princesas a reyes agónicos. Incendié la ciudad de Trebon. He pasado la noche con Felurian y he despertado vivo y cuerdo. Me expulsaron de la Universidad a una edad a la que a la mayoría todavía no los dejan entrar. He recorrido de noche caminos de los que otros no se atreven a hablar ni siquiera de día. He hablado con dioses, he amado a mujeres y he escrito canciones que hacen llorar a los bardos. Me llamo Kvothe. Quizá hayas oído hablar de mí."

★★★★★ 5/5